Senderismo

El recorrido de esta ruta de senderismo es también una ruta de peregrinación también. Se inicia por asfalto pasando rápidamente a pistas y senderos que recorrerán parte del Parque Natural Sierra de Andújar. Se inicia en la fuente del Pilar Junto al inicio de la etapa atravesamos el puente renacentista de Marmolejo sobre el rió Guadalquivir, dejando a nuestra derecha las instalaciones del Balneario y tras 250m nos podemos encontrar el manantial de agua ferruginosa llamado como fuente de los “perros”. El agua en esta zona es muy apreciada (Balneario de Marmolejo) por sus beneficios medicinales y viene dado por sus características químicas y físicas. 400 m más adelante abandonamos el asfalto y comienza una pista en buen estado justo a la altura de la central eléctrica que vemos a nuestra derecha, continuamos acompañados del Guadalquivir. A 1 km la pista gira hacia la izquierda para subir por el barranco del agua, siguiendo contracorriente el arroyo del Comisario. Continuamos por la pista rodeados de encinas y zarzas y juncos en la ribera del arroyo hasta que nos encontramos por la zona del Baldio. En este punto nos encontramos con el primer gran repecho que nos llevara de los 340m en los que nos encontramos hasta los 470 m en los que se encuentra el mirador natural con banco incluido para poder disfrutar de unas magníficas vistas en las que se aprecia La sierra de cardeña y Montero así como el embalse del Continuamos por buena pista hasta la puerta de entrada a al Parque Natural Sierra de Andújar y lo hacemos por la casa nueva de La Cabrera convertida en casa de los guardas forestales del parque. Desde aquí podemos ver el santuario al que nos dirigimos. Si la época en la que realizamos la peregrinación es otoño o primavera podremos disfrutar de unas magníficas vistas del bosque , el paisaje ha cambiado repentinamente a mejor, el parque natural despliega todos sus encantos nos muestra el otoño colorido de sus dehesas donde los pinos, encinas, quejigos y alcornoques empiezan a cambiar sus colores. Aquí el matorral mediterráneo (jaras, lentisco, romeros, etc.) son el abrigo y cobijo ideal para uno de los animales más buscados por los zoom fotográficos de esta zona el lince ibérico, escurridizo y audaz como el solo nos deja rastros con los que intuimos su presencia. Nos dirigimos al cortijo de Navalasno, donde se puede aprovechar para hacer un alto en el camino y retomar fuerzas. Pasamos por Los Majadillos para continuar por el Cordel de Mármoles. A la altura de arroyo de Navalasno un poco más adelante enlazamos con el cordel de Navalasno que nos llevara hasta el cortijo del mismo nombre. Continuamos nuestro camino y a unos 500m enlazamos el cordel que traíamos con la cañada real de Extremadura, la que seguiremos algo menos de 2km hasta abandonarla en el arroyo de Los santos que también se encuentra seco pero lo cruzamos por el puente de madera para hacernos unas fotografías de grupo. Tras cruzar el puente salimos del espeso bosque de pinos piñoneros y 600m nos restan hasta la verja y el canino asfaltado que nos conducirá al cerro del cabezo. Dejamos a nuestra derecha el famoso camino de los Caracolillos y encaramos el último tramo, hasta coronar el santuario de la Virgen de la Cabeza que es nuestra meta.